El Charquicán

© Ana María Amenábar 2011. Derechos reservados. Prohibida su reproducción.

El charquicán es uno de mis guisos preferidos por ser sabroso, apetitoso, nutritivo, liviano y bajo en calorías. Me encanta prepararlo personalmente y generalmente como un poquito más que los demás.
Este emblema nacional está considerado como plato principal o de fondo. En ocasiones es usado como acompañamiento de alguna carne, pudiendo suprimirse ésta  (del charquicán)  en este caso lo que daría como resultado un «charquicán vegetariano»  por nombrarlo de alguna forma, personalmente creo que al omitir la carne lo haría perder su esencia. 
© Ana María Amenábar 2011. Derechos reservados. Prohibida su reproducción.
Escribiré un poco sobre la historia del charquicán y para hablar de este tema me he basado en el libro » La olla deleitosa, cocinas mestizas de Chile» de la antropóloga y escritora chilena Sonia Montecino.
El charquicán, es la variante de otro plato que adquirió en el sur la denominación local de «valdiviano». La evolución del charquicán puede verse desde el período colonial hasta hoy, en que ha sufrido una transformación dada por el uso de carne fresca y no salada y seca conocida como charqui : palabra de origen quechua, su producción y consumo eran común en el  mundo andino, donde pescados y carnes se desecaban al sol para precervarlos y evitar la pudrición.
El charquicán nos habla de una densidad culinaria que tiene vínculos con lo hervido lo secado, lo cocido. Es un plato que no acepta en su consumo lo crudo ni lo frío y por ello emerge como signo cultural por excelencia. Si nos detenemos en los ingredientes , el charqui es producto  de una paciente operación culinaria de trozado, salado y secado; las papas, zapallo y cualquier otro vegetal se cocerá, sin importar su desmenuzamiento, e incluso en muchas recetas se muelen para formar una pasta cremosa con ellos..
El eje central del charquicán es la carne que protagoniza distintas variantes en el pasado y en el presente. Se trata de una carne que se singulariza por  su lejanía con el animal recién muerto,que simboliza la comunidad que lo ha inmolado, pero que transforma ese sacrificio en vicario a través de la salazón,el secado,el asado y el hervido. Como motivos que acompañan a esta suerte de «sublimación» de lo natural están los tubérculos y las cucurbitáceas,los antiguos alimentos precolombinos que deben estar muy cocidos y desprovistos parcialmente e sus formas originales.
La llegada a la mesa del charquicán debe ser caliente y generalmente servidos en platos individuales. Sus texturas se aproximan a la espesura de lo cremoso, de lo semitriturado que dialoga con lo sólido de las tiras finas de charqui. Sus tonos son tenues, amarillentos, marrones y se puede coronar  con una ligera  pintura roja, el mequén.
Animense a prepararlo, es fácil, sabroso y novedoso para todos los que no lo conocen.

© Ana María Amenábar 2011. Derechos reservados. Prohibida su reproducción.
Charquicán
(6 personas aprox.)
1/2 kg de asiento o carne molida
1/2 cebolla
4 papas grandes
1/4 kg zapallo
Porotos verdes, choclos,arvejas y tomate (opcional)
2 cucharadas de aceite
2cucharadas de aji de color o páprika
11/2 cucharada de orégano
Pimienta recién molida
Comino
Sal
Cortar la carne en cubitos pequeños o molerla gruesamente. Freírla con el aceite en una olla por unos minutos e incorpore las papas y el zapallo  cortados en cubos, la cebollas en cubitos pequeños (brunoise) y los aliños después de freír por un par de minutos más agregar agua hirviendo o caldo de vacuno, hasta cubrir y cocinar hasta que las papas estén bien cocidas y blandas. Apisionar  las papas y el zapallo con una cuchara para deshacerlas parcialmente. Se sirven en platos individuales espolvoreados con merquén, ají o «color» que es una mezcla de grasa de cerdo con ají de color.
Si decide rememorar antiguos tiempos usando charqui, ponga al horno 200 gr, por unos 5 minutos, córtelo en trocitos y macháquelo en el mortero. El entusiasmo culinario suele agregarle a este guiso choclos, porotos verdes y tomates.

14 comentarios sobre “El Charquicán

  1. ¿Que te digo?
    Está de lujo… Con historia y todo.
    Plato como cuentas, que tiene sus años. Pero como el que sabe, sabe tu presentación lo hace lucir muy actual y elegante.

    Gracias por sumarte con tu post al Día de la Cocina Chilena.

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  2. Tita! Que´fantástica entrada y homenaje al querido charquicán, estaba por subirlo, pero no estaría a la altura, tu ya lo has dejado en su sitial, mmm ¿y las cebollas en escabeche para acompañarlo? besitos

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  3. El charquicán es un plato que comí por primera vez hace 5 años, por supuesto no en mi casa, ahí nunca se ha preparado.
    Ni te cuento lo que dije cuando me lo sirvieron, casi me echaron del trabajo.
    Creo que la versión vegetariana me gustaría probar, voy a guardar tu receta e intentaré hacerla durante el invierno.
    Yo también creo que es emblemático de Chile, se ve muy bueno.
    Besos y felíz dia de la cocina chilensis.

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  4. Vaya, hoy casi que he tenido que usar el diccionario para entender la receta, qué cantidad de palabras nuevas!
    Gracias por hacerme descubrir el charquicán, me encanta aprender cosas nuevas cada día 🙂

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  5. Si que lo conocía Tita,lo comí en Bs As,aunque no sé si habrán sidos fieles a la receta,lo que se que nos gusto.Utilizo muchísimo el zapallo o calabaza,como se dice aquí,en magdalenas,quiches,en guisos,estofados es que con maíz nos encanta,hasta un flan tengo con ella…
    Una pregunta,quieres decir carne picada,cuando te refieres a la molida,no?
    Este plato será una apuesta segura en cuanto haga un poco de aire,aunque sea…es que hace un calor extremo.
    Mil gracias,es una gran receta,sde esas cn solera ;))

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