© Francisca Amenábar 2011. Derechos reservados. Prohibida su reproducción total o parcial.En breves palabras, un viaje de treinta horas no es menor. Sin embargo, no se nos hizo tan largo gracias a películas, conversa, etc. Llegamos al aeropuerto (inspirado en los «supersónicos») y el equipo de LG nos estaba esperando con traductora y un fotógrafo muy animoso.
© Francisca Amenábar 2011. Derechos reservados. Prohibida su reproducción total o parcial.
Llegamos a la habitación donde el jet lag se hizo notar, nos animamos y fuimos a almorzar a un restaurante buffet del hotel, degustando los primeros sabores coreanos. Luego con Sabrina, nuestra traductora, fuimos de paseo a una calle donde hay muchos puestos de souvenirs. La verdad es que se evidencia claramente una cultura muy rica e interesante: arte, artesanía, dinastías, colores y sabores. Estas fotos resumen nuestra primera impresión de una ciudad tan moderna, organizada, variada, amable y respetuosa.
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