Magdalenas, Clásicas y Deliciosas

© Ana María Amenábar 2010. Derechos reservados. Prohibida su reproducción.

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Las magdalenas simples, tiernas y adorables. Con su sencillez y elegancia sobresalen ante sus pares. Su agradable sabor a limón contrarresta  y equilibra  el paladar cautivándonos cada vez más.
Estos quequitos son un clásico de la pastelería, muy comunes en España y Francia (país de origen). Generalmente tienen forma de concha, se preparan con azúcar, harina, mantequilla, huevos  y se aromatizan con ralladura de limón o agua de azhar. Se hornean en moldes con forma de concha o en pirotines (cápsulas de papel).

© Ana María Amenábar 2010. Derechos reservados. Prohibida su reproducción.

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Las Magdalenas de Commercy deben su nombre a una joven llamada Madeleine Paulmier, que en 1755 elaboró estos bizcochos para el rey de Polonia Stanislas Leszczyński (1677-1766). El monarca los encontró deliciosos y los bautizó con el nombre de la joven campesina. Rápidamente estos quequitos conquistaron la corte de Versalles y luego París. 

Otras fuente las remontan a la época de los peregrinajes a Santiago de Compostela. Una joven llamada Magdalena les servía a los peregrinos unos pastelitos en forma de concha, símbolo de este peregrinaje.

Linda historia… Magdalena, una mujer generosa… Que distinto sería el mundo si todos fueramos como Magdalena.


© Ana María Amenábar 2010. Derechos reservados. Prohibida su reproducción.

Dieguito es mi hijo menor, un regalón sin remedio, tiene un corazon muy generoso, una dulzura y ternura infinita así también es su «apetito», va comiendo todo lo que se le cruza por su camino. El refrigerador es su lugar favorito.

Me demoré en hacer esta entrada porque  él principalmente iba arrazando con los quequitos, frutillas, arándanos y todo lo que estaba a su paso, a penas yo me descuidaba unos segundos. Sus hermanos fueron cómplices de este «asalto», según ellos Dieguito era el único «culpable» pero comieron todos por igual. Esto significó, hacer todo otra vez, fue tragicómico….Ahora me rio porque tengo listo el post, pero en el momento miraba al cielo,  me tomaba la cabeza y suspiraba….Así es la vida, pensaba….Finalmente terminamos todos juntos riéndonos y comiendonos las magdalenas.

Les dejo esta conocida receta que se han mantenido íntegra por años.


Magdalenas
(12-15 unidades)

4 huevos
200 g. de azúcar
200 g. de mantequilla sin sal derretida.
200 g. de harina sin polvo de hornear cernida.
16 g. de polvo de hornear.
Ralladura de 1 limón o 1 cucharadita de agua de azhar.
Pizca de sal.
Cápsulas de papel

Encender el horno a 180ºC. Colocar las cápsulas de papel dentro de moldes para hacer queques individuales. Los moldes pueden ser de silicona o de metal.
Batir las claras a nieve, incorporar el azúcar, las yemas, ralladura de limón. Dejar de batir. Añadir la mantequilla derretida de a poco alternando con la harina y los polvos de hornear, es importante hacerlo con movimientos envolventes. Rellenar 3/4 partes de cada cápsulas  con la mezcla.  Hornear durante 15 a 20 minutos o hasta que al enterrar un mondadiente salga seco. Dejar enfriar y espolvorear con azúcar flor.